Ajenjo

Planta herbácea vivaz a la que año tras año y después de secarse al llegar la temporada de fríos le vuelven a crecer nuevas ramas en primavera, ramas que no miden más del metro de altura. Estos nuevos tallos son rectos y con algunas ramificaciones, pero lo más característico es su aspecto blanquecino, al igual que el resto de la planta, que debe al vello que la recubre en su totalidad, incluidas las hojas. Lo podemos encontrar en zonas montañosas de la Península, lugares húmedos y a menudo en antiguas plantaciones, bastante corrientes en la antigüedad.

Propiedades

Artemisia absinthium (en latín medieval aloxinus), llamada comúnmente ajenjo, asensio, ajorizo, artemisia amarga o hierba santa, es una planta herbácea medicinal, del género Artemisia, nativa de las regiones templadas de Europa, Asia y norte de África. Conocida desde muy antiguo ya por los egipcios, transmitida después a los griegos, esta hierba ha sido denominada la "madre de todas las hierbas" en la obra "Tesoro de los pobres" dadas sus múltiples aplicaciones curativas. Se utiliza como tónico, febrífugo y antihelmíntico, así como en la elaboración de la absenta.

Como planta medicinal entre sus propiedades se menciona que la más importante es la aperitiva. Es un tónico estomacal, vermífugo y antiséptico. Afecta su sistema neurológico, se ha demandado su uso de remediar indigestión y dolor gástrico. El aceite de ajenjo puro es muy venenoso.

Hojas y pimpollos se cosechan al principio de su fructificación, necesitando un secado natural o artificial. Sus sustancias activas incluyen silica, dos elementos amargos (absintina y anabsintina) a las que debe sus propiedades digestivas; aceite esencial rico en tuyona de acción vermífuga y emenagoga, pero tóxica en dosis altas; sales minerales (nitrato potásico), tanino y resina, ácido málico, y ácido succínico.

Aplicado correctamente, el ajenjo tiene unas interesantes propiedades medicinales, como:

Tónico gástrico: como todas las plantas amargas desarrolla un efecto tónico sobre el estómago, aumentando el apetito y estimulando la secreción de jugos gástricos. Conviene pues a los inapetentes y a los dispépticos (que padecen de digestiones pesadas). No así a los ulcerosos y a los de temperamento sanguíneo, pues el aumento de secreción de jugos gástricos les resulta perjudicial. Como bien indica Font Quer, «el ajenjo no debe tomarse sin necesidad».

Colerético: por el hecho de aumentar la secreción biliar, ejerce sobre el hígado una acción favorable, descongestiva y de estímulo de sus funciones. Resulta apropiado en los casos de insuficiencia hepática, y en la fase de convalecencia de las hepatitis víricas.

Flores azules de acónito

Vermífugo potente: los adultos lo llegan a tomar, aunque resignados; pero los niños lo rechazan abiertamente. Para ellos es mejor utilizar otros vermífugos.

Emenagogo potente: actúa sobre el útero (matriz) provocando la menstruación; pero además, normaliza los ciclos. Se recomienda, pues, para las jóvenes pálidas y debilitadas, que usualmente padecen de reglas irregulares y dolorosas. Avicena, el renombrado médico persa del siglo XI, lo prescribía «para calmar a las mujeres agrias y biliosas».

En medicina, la hierba se usa para hacer un té para ayudar a la mujer embarazada durante el trabajo de parto. Se hace un vino por maceración. Como polvo se hace una tintura. El aceite de la planta puede usarse como estimulante cardíaco para mejorar la circulación sanguínea. El aceite puro de Artemisia es muy venenoso, pero a un dosaje justo no ofrece riesgos.

Otros usos

El característico olor se usa contra pestes. Antiguamente era utilizado como insecticida contra la polilla de ropa. Tiene secreciones de sus raíces, ejerciendo un efecto inhibidor sobre el crecimiento de plantas cercanas. Es muy útil como repelente de insectos, pero no alcanza con plantar sobre el borde de un área de cultivo.

Es una de las principales plantas en la elaboración de la absenta y del vermú (el nombre de esta bebida proviene del nombre que recibe la planta en alemán, Wermutkraut )

En 1890, el "hada verde", como era llamada la bebida de ajenjo o absenta, se extendió por toda Europa, EEUU, y Sudamérica, principalmente en Chile y Argentina, donde se consumía profusamente en los cafés de París y otras ciudades. Fue la musa inspiradora de los poetas y artistas. La industria del vino en Francia impulso un fuerte lobby en contra de la absenta -dado que éste se vendía más que el vino- en una campaña de desprestigio y satanización que le atribuyó poderes alucinógenos y tóxicos, pero que la ciencia moderna ha demostrado ser absolutamente falsos.

En el Norte de África reemplaza a la hierba buena durante el invierno para la preparación del té verde.

Administración

Infusión.

Se prepara con siete gramos de la sumidad florida de la planta, sobre un litro de agua ya hervida, dejándolo en contacto durante quince minutos. De esta preparación se puede tomar un máximo de dos vasos al día como aperitivo.

Polvo.

La dosis máxima es de tres gramos al día, empleándose como aperitivo o antitérmico. En mayor cantidad -hasta un total de 8 gramos al día- se puede emplear como vermífugo contra los oxiuros. .

Tintura.

Se pueden añadir 15 gotas a una infusión de menta o anís, para tomar tres veces al día fuera de las comidas.

Acción Farmacológica

El aceite esencial de ajenjo produce un efecto carminativo, expectorante, antihelmíntico, antibiótico, antifúngico y espasmolítico. Los principios amargos son responsables de su acción aperitiva y colerética. Las sales potásicas le confieren una acción diurética. También se usa como emenagogo, antipirético y tópicamente como vulnerario (cicatrizante).

Indicaciones

Inapetencia, dispepsias hiposecretoras, disquinesias hepatobiliares, espasmos gastrointestinales, meteorismo. Amenorrea, dismenorrea. Oxiuriasis. Bronquitis. En uso tópico: Dermatomicosis, otitis, heridas, quemaduras y ulceraciones dérmicas.

Contraindicaciones

Hipersensibilidad conocida a éste u otros aceites esenciales. No aplicar tópicamente a personas con alergias respiratorias.

El aceite esencial no se debe prescribir por vía interna durante el embarazo, la lactancia, a niños menores de 10 años (el aceite esencial es abortivo y neurotóxico), ni a pacientes con epilepsia, parkinson, hepatopatías o con dispepsias hipersecretoras. No prescribir formas de dosificación con contenido hidroalcohólico a niños menores de dos años ni a consultantes en proceso de deshabituación etílica.

Precaución / Intoxicaciones

Recomendamos no prescribir el aceite esencial de ajenjo puro por vía interna: por su contenido en tuyona, es altamente tóxico. Sin embargo, el extracto fluido de ajenjo contiene relativamente poca cantidad de tuyona.

La intoxicación se manifiesta con: espasmos gastrointestinales, vómitos, retención de orina por afectación renal severa, vértigo, temblores y convulsiones. El uso prolongado de absenta (bebida alcohólica elaborada a base de ajenjo) producía un síndrome denominado absintismo, que se caracteriza por transtornos nerviosos, gástricos y hepáticos, por lo que su consumo está prohibido en muchos países.

Tener en cuenta el contenido alcohólico del extracto fluido y la tintura.

Floración:

Podemos encontrar ajenjo en flor entre julio y septiembre. Las flores, pequeñas y de color amarillo, resultan más llamativas pues se reúnen más de treinta en un capítulo redondeado, pareciendo de esta forma mucho más grandes. Estos se encuentran protegidos por una serie de brácteas. La recolección deberá hacerse en verano, una vez la planta se encuentre con los capítulos recién abiertos o a punto de abrirse; se procede a recoger las sumidades floridas y a efectuar una desecación lo mas rápida posible, siempre al abrigo del sol, preservando después la muestra de la humedad con los medios apropiados.

Usos Comunes:

Carminativo Aperitivo Antibiótico, vermìfugo